A pesar de la poca información que he podido encontrar, creo que
el movimiento republicano en Torrubia fue muy activo.
En el diario de sesiones del 15
de enero de 1870 de las Cortes Constituyentes, Don Eugenio
García Ruiz, diputado en el Sexenio democrático y partidario del
republicanismo unitario, intentó presentar una exposición firmada por los
republicanos de Torrubia del Campo, pidiendo que en atención a no encontrarse
monarca, se estableciera la república democrática:
«- ¿La unitaria? -
le preguntó el ministro de gobernación-.
- La misma que votamos su
señoría y yo el 30 de noviembre de 1851 - respondió el señor García
Ruiz-.
- Votamos contra aquella
dinastía. No votamos república y si no, que diga su señoría que república
votamos.
- La república
democrática.- concluyó el Sr. García Ruiz-.»
«Ciudadano director de El Combate:
Agradeceremos en el alma y le
suplicamos que inserte en el valiente periódico que tan dignamente dirige la
siguiente protesta: Los que suscriben, republicanos federales, dispuestos a
verter su sangre en aras de la gloriosa bandera federal, protestamos
enérgicamente con toda la fuerza de nuestro corazón, contra la conducta que
hasta aquí viene observando el Directorio. No seríamos dignos de llamarnos
republicanos si no protestáramos con la misa franqueza que defendemos nuestra
santa causa contra u Directorio que en estas circunstancias, que pueden salvar
la República, se les ve tolerar que nos lleven al absolutismo ¡desgraciados,
dementes!
No os extrañéis que, al sentir
latir nuestros corazones, protestemos de esta manera, porque en estas
circunstancias, no creemos que deben ser respetados los que son un obstáculo
para la revolución.
Le desean, ciudadano director,
salud y República federal.
18 de mayo de 1972
Remigio Luna.- Restituto Luna.-
Antonio Salazar.- José Rosales.- Juan Luna.-Benito Fernández.-Antonio Pérez.-
Eusebio Orozco.- Siguen más firmas.-»
Nueve meses después de esta carta
a El Combate, llegó la Primera República española. Fué el 11 de febrero de
1873, tras la abdicación de Amadeo I de Saboya, quien devolvía la soberanía
nacional a los representantes del pueblo, que se la habían ofrecido en votación
dos años antes. Ese mismo día, el Congreso y el Senado, constituidos en
Asamblea Nacional, proclamaron la República por 258 votos a favor y 32 en
contra.
Según palabras de Emilio
Castelar: «con Fernando VII murió la monarquía tradicional; con la fuga
de Isabel II, la monarquía parlamentaria; con la renuncia de Don Amadeo de
Saboya, la monarquía democrática; nadie ha acabado con ella, ha muerto por si
misma; nadie trae la República, la traen todas las circunstancias, la trae la
conjuración de la sociedad, de la naturaleza y de la Historia, Señores,
saludémosla como el sol que se levanta por su propia fuerza en el cielo de
nuestra patria.»
El primer intento republicano de
la historia de España se caracterizó por la inestabilidad política y expiró el
29 de diciembre de 1874, con la denominada Restauración borbónica que alzó al
poder a Alfonso XII.
Pero sigamos con los republicanos
de Torrubia, que no se resignaban y proclamaban que «allí donde
estén la fe, el entusismo y la perseverancia para traer la República, estarán
ellos también».
«Reunidos todos los republicanos
de esta localidad, se celebra en verdadero meeting la conmemoración de la fecha
gloriosa del advenimiento de la República española, tan grande al nacer como
desgraciada en morir.
Leído el Manifiesto que nos
dirigen los prohombres que han de representar el estado de la patria, dirigido
a las capitales y pueblos de España, este Comité ha consultado a todos los
ciudadanos, los cuales todos conformes y unánimes, declaran que se adhieren y
aprestan, según lo exijan las circunstancias, a cumplir como buenos soldados
republicanos las órdenes de la Junta Central de Unión Republicana de la capital
de Madrid. Advirtiendo que ya es hora, después de veinticuatro años salgamos
del letargo vergonzoso de un partido tan potente.
Terminado el meeting a las dos de
la mañana de este día, en que se inicia la hora de la República, un grito
potente de saludo y un fraternal abrazo, mandamos a todos los republicanos y
sus jefes de toda España un ¡Viva la República! ¡Viva el pueblo soberano!
Levantada esta acta en Torrubia
del Campo, a 11 de febrero de 1897.- El Presidente, Remigio Luna.- El
Vicepresidente, Cecilio Torres.- El Tesorero, Candelas Serrano.- Vocales e
individuos del Comité, Pedro Torres, Casimiro Silva, Pablo Escribano, Marcelino
Fernández, Guillermo Barranco, Ángel Tornero, José María Martínez, Felipe
Fernández, Marceliano Fernández, Celestino Fernández, Valentín Moreno,
Francisco Fernández, Julián Torres.- El Secretario, Isidro Martínez.- El
Vicesecretario, Jesús Fraile.»
118 años después de esa reunión,
he sabido que uno de esos «buenos soldados republicanos» y
vicepresidente del Comité Republicano era mi bisabuelo Cecilio Torres
Gutiérrez.
«Los republicanos de Torrubia del
Campo. El presidente del Comité Republicano de Torrubia del Campo, D. Remigio
Luna, nos manifiesta que en nombre y representación de sus correligionarios, ha
contestado a la circular que le ha dirigido el Consejo interino del partido
republicano nacional en los términos siguientes:
Primero. Que debe disolverse
el partido republicano nacional y contribuir con sus fuerzas a los propósitos
del partido republicano de mayor influencia en la opinión.
Segundo. Que, a juicio de
sus correligionarios, los partidos republicanos progresista y federal unidos
constituyen la esperanza de los republicanos de Torrubia; y
Tercero.
Que allí donde estén la fé, el entusiasmo y la perseverancia para para
traer la República, estarán los republicanos del mencionado Comité».
En 1893 los republicanos
progresistas, federalistas y centristas formaron la coalición electoral Unión
Republicana. En 1903 Nicolás Salmerón y Alejandro Lerroux trataron de unificar
todas las tendencias republicanas en un solo partido, la Unión Republicana
(UR). En su programa contemplaban la restauración de la Constitución de 1869,
la proclamación de la República y la convocatoria de Cortes Constituyentes. En
las elecciones de 1903 obtuvieron un total de 30 escaños de los 403.
Habría que esperar aún hasta 1931
para ver la proclamación de la II República. Muchos de ellos, no pudieron
disfrutarla.
María Torres
Nieta de un republicano español
(Ahora biznieta también)